martes, 5 de marzo de 2024

Quirón o el dolor como parte de la vida

Este año tenemos un evento astrológico muy poderoso en materia de sanación de heridas profundas: Quirón atraviesa el signo de aries al mismo tiempo que lo hace el nodo norte. ¿Qué significa esto? Veamos.

Un poquito de contexto

Quirón es un asteroide que fue descubierto hace poco y que hace referencia al arquetipo del gran maestro Quirón, de la mitología greco-romana. Este personaje es uno de mis favoritos totalmente, porque nos habla del monstruo, que es algo que abordé hace un tiempo en este mismo blog (ver https://naoosmesmos.blogspot.com/2023/09/ser-de-la-monstruosidad-y-otras.html). Quirón nace de su madre Fílira, una ninfa del océano y de Cronos, en ese momento Dios regente del mundo, que viola a esta ninfa en forma de caballo y así engendra a este ser. Es el primer centauro, por lo que su madre lo ve como monstruoso y lo rechaza. Cronos tampoco tenía personalidad de padre cuidador, así que Quirón recibe un profundo rechazo tan pronto como comienza a existir. Apolo, el sol (el ser) lo acoge poco tiempo después y hace de él un gran maestro. Esta es la primera parte del viaje de Quirón.

Ya como maestro y restaurado en su autoestima, entrena posteriormente a muchos héroes, incluido Hércules, que tiempo después y en un accidente lo hiere con una flecha envenenada. Esta herida es producto del veneno de la Hidra y marca el comienzo de un segundo viaje de este personaje: cómo curar una herida incurable. Esto aumenta su maestría, por lo que puede compartir este saber con muchos seres. Sin embargo, no consigue su objetivo y el final de su sufrimiento ocurre cuando cede su inmortalidad a Prometeo y es ascendido a la constelación de sagitario.

El otro elemento de esta ecuación es el nodo norte, que se trata de un punto matemático que marca aquello que estamos aprendiendo, integrando, personal y colectivamente a nivel kármico. Es la cabeza del dragón que se 'come' las experiencias para hacerlas parte de sí. Aries, que marca la energía de estos dos elementos en este año de 2024 nos habla de muchas cosas: del movimiento, de la guerra, de la autodeterminación, de la autonomía, del liderazgo, de ir por aquello que queremos.

La unión de estos tres elementos nos da un mensaje potente: es momento de aprender, como humanidad, sobre el dolor incurable de no lograr lo que queremos. Y aceptarlo.



El dolor y la vida

La historia de Quirón es bella y trágica, y fundamentalmente nos habla del dolor. Y hoy quisiera compartirles sobre este planetoide como ese mensaje que nos trae la vida de la inevitabilidad del dolor, del sentir dolor como parte de sentir la vida. Vivimos en una sociedad que nos ha invitado a creer que 'necesitamos' satisfacer nuestros deseos prontamente y siempre, que el éxito es que nada duela nunca, que siempre nos vaya bien. Es una sociedad que vive en estas comprensiones infantiles de la vida, en el sentido de que espera de manera fantasiosa veranos eternos y si no logramos esto, algo está mal con nosotros.

Pero la vida no funciona así y no sería deseable que lo hiciera. Los ritmos naturales son claros al respecto: Todo está permanentemente en cambio. Existen el día y la tarde y la noche; existen los periodos de frío y de calor, de lluvia y de sequía; existen los nacimientos y las muertes de las estrellas. Existe la vitalidad inocente de la infancia y la adolescencia, la energía creativa de la edad adulta, y la calma y el decaer de la vejez hasta que la expresión humana que asumimos se transforma y deja de existir. Estos cambios, el transitar de un momento a otro, con frecuencia nos ocasionan tristeza, dolor o alguna forma de incomodidad y esto es parte del proceso de vivir.

Quirón en Aries nos habla de un dolor relacionado con esto específicamente: no lograr lo que queremos, sentirnos restringidos para ir por nuestros objetivos o que nuestros intentos no sean exitosos y lo que duele esto.

Aceptar ese dolor, poder transitar la incomodidad y seguir adelante inclusive con ella, es parte de las invitaciones que nos hace el cielo hoy: trascender las pataletas arianas que pueden hacerse al no obtener lo deseado (me boto al piso, grito, saco a la gente a marchar a las calles, estallo una guerra si hace falta) y comprender que esto hace parte de la vida y que sí, duele, pero podemos integrar esta información e ir hacia una mayor madurez.

La astrología además es maravillosa, porque nos enseña a través de historias y esas historias nos dan 'pistas' de cómo aproximarnos a la sanación y al autoconocimiento. Los viajes de Quirón son ejemplos de cómo es que funciona esta herida: primero, la herida del rechazo, de no sentirnos suficiente para obtener lo que queremos. Esto hace parte de los mensajes que recibimos todo el tiempo de parte de la sociedad: siempre tenemos que ser 'más' y tenemos que 'ir por ello', como Aries. Pero a veces no podemos hacer eso y sostenernos todo el tiempo en ello trae agotamiento. 

Qué hacer entonces

¿Cómo podemos abordar esto? Quirón también nos da pistas: es experto en las artes, en las manualidades (incluida la cirugía), en aquellas actividades que implican presencia y atención. Aries nos habla del movimiento, de la expresión, de la actividad física. Con estos dos elementos en mente ¿Qué podemos hacer hoy que nos ayude a lidiar con el dolor, a experimentarlo, desde la conciencia? 

Y el segundo viaje de Quirón nos cuenta hacia dónde evoluciona la conciencia del dolor: a sanar a otros, a compartir nuestras experiencias y a seguirlo haciendo mientras dure nuestra existencia. Porque el dolor es algo que tiene la misma característica de toda la existencia: surge y desaparece, surge y desaparece, pero mientras esto ocurre, además nos da su mayor regalo: nos transforma y con frecuencia y si le damos espacio, nos expande.

Quirón es una invitación a la adultez. Y es solamente una de aquellas que la vida nos plantea, pero nos habla del primer paso para poder crecer: aceptar el dolor como la realidad que es en nuestras vidas. Negar el dolor solamente lo hace crecer y nos implica encontrarnos cada vez más de frente con eso que nos duele, para que podamos verlo. La negación del dolor nos lleva en el camino opuesto al del sanador que representa Quirón: a la enfermedad y con nuestra inconsciencia, también la enfermedad de nuestras familias y de la sociedad.

En astrología se habla mucho del espacio en donde tenemos cada uno a Quirón como aquella herida que no sana. La imagen mental es clara: estamos heridos. Una herida no atendida, se enferma más, duele cada vez más. El cuerpo clama por nuestra atención para que la veamos y le ayudemos a sanar. Bueno, así es como funciona este asteroide en nuestras vidas: nos pide atender un espacio de la vida de manera permanente, porque es algo que vinimos definitivamente a trabajar. Al atenderlo, no sana, pero sí nos enseña y nos ayuda a expandirnos.

Pero además, esta imagen de estar heridos también nos conecta con lo profundamente humano. Todos estamos rotos en algún nivel y esto es lo que nos permite recordar nuestra fragilidad, nuestra falta de poder absoluto, nuestra mortalidad. Quirón cede su inmortalidad para poder descansar, ¿qué conlleva más vulnerabilidad que el dolor?

Algunas ideas para transitar este quirón en aries

Finalmente, algunas sugerencias que pueden resultar de utilidad en este tránsito desde la perspectiva del autocuidado y la astrología. Sin embargo, recordemos que Aries también nos invita a andar nuestro propio camino, entonces se vale descubrir lo que nos viene mejor! 
  • Atender a nuestro niño interior. Esta herida de frustración nos viene de la infancia, del modo en que aprendimos a lidiar con no obtener lo que queríamos. ¿Cómo puedes acompañarte hoy mejor a lidiar con tu frustración?
        Ideas: aries es un signo físico y que requiere mucho movimiento. ¿Qué tal gritar en un espacio seguro o golpear algún cojín? Darle un espacio a la rabia de manera segura       que te mantenga seguro/a a ti y a tus personas cercanas.
  • También correr, hacer ejercicio físico exigente puede ser una forma poderosa de transformar estas energías.
  • ¿Qué sientes que no puedes lograr este tiempo? Identificar este dolor es ya una manera de transformarlo. Lo que vemos, nos hace libres.
  • ¿Te sientes especialmente competitivo? La astrología trae su medicina por ejes: un poco de conciliación, de solidaridad con los otros (libra) puede venir muy bien.
  • También puedes usar esta energía de la competencia y la impulsividad, para cosas creativas y para el inicio de proyectos.
  • Aprovecha la energía de Aries para ser valiente y conocer tus heridas. Ir a terapia es un paso que puede costarnos mucho, es un momento poderoso para finalmente hacerlo!
Espero que la reflexión les resulte de utilidad. Este compañero de viaje estará con nosotros hasta el año 2027, pero en alianza con el nodo norte hasta el próximo enero de 2025. Aprovechemos este caminar :)

P.D: Dirán que cómo doy de lata con Quirón por este último tiempo, pero ocurre que mi nodo natal está en aries, así que hace parte de mi tarea en esta existencia experimentar este tránsito con intensidad 😌.